A través de un acuerdo de DRC se pueden proteger distintos
atributos naturales del predio, ya sean tangibles o intangibles

Especies de flora o fauna amenazadas
Un bosque u otro tipo de formación vegetacional
Un hábitat
Un paisaje
Especies de alto valor cultural o social
Usos tradicionales compatibles con la conservación

Según lo que acuerden las partes del contrato, en un predio bajo
DRC se pueden estringir o prohibir distintas actividades:

Usos industriales
Agricultura o ganadería intensiva
Desarrollo inmobiliario indiscriminado
Alteración de los suelos, como extracción de áridos
Alteración de humedales, ríos o cualquier otro cuerpo de agua
Tala del bosque nativo o destrucción de la vegetación
Depósito basura o escombros
Subdivisión
Servidumbres que amenacen los valores de conservación
Cualquier otro uso no compatible con la conservación

Por otro lado, es posible definir ciertas actividades permitidas

Ecoturismo y actividades recreativas
Construcción de residencias Investigación y actividades educativas
Agricultura o ganadería de bajo impacto
Extracción de leña para uso personal
Otras actividades que tengan mínimo impacto en los valores de conservación

Un acuerdo de DRC puede aplicarse a la totalidad del predio, una
parte, o delimitar zonas con distintos usos.

TOTALIDAD DEL TERRENO

PARCIALIDAD DEL TERRENO

SECTORES DEL TERRENO